jueves, 14 de enero de 2010

El milagro de la vida.

Ahora que ha nacido mi primera sobrina me planteo lo bonito que es el milagro de la vida. Los nacimientos y recien nacidos son capaces de reunir a la familia y reconciliar personas que por naturaleza son irreconciliables. Es muy bonito verles crecer, hacer sus primeras cucamonas, sacarles parecidos en los rasgos, en los gestos...



Pero creo que lo que debe ser una verdadera experiencia será hacerse padre y me explico...

Tener potestad para cuando nuestro hijo nos diga:

Hijo "Papá quiero una pelota"

Padre "¡Te voy a comprar dos!

Hijo "Papá quiero una consola"

Padre "¡Te voy a comprar un consolo!"

Cuando esté completamente eufórico decirle: "no rias tanto que después vas a llorar..." o cuando esté llorando comentar: "Uiiii... este ya va a estar dormido"

Esas frases, que otro día deberíamos estudiar más a fondo, deben producir una sensación dificil de describir, de hecho a mi se me acaban de poner los pelitos de punta.


Mientras llega el feliz momento de que mi sobrina pueda entenderlas, disfrutaremos diciendo cosas como: "tiene la nariz de mi hermana", "las extremidades de mi cuñado", "la cabeza del abuelo"... Que más que tener una sobrina parece que tengamos una médico forense...

2 comentarios:

  1. jajajaja.. muy bueno!!

    Yo tengo ganas de decir: "como te caigas encima te pego"

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  2. la niña de te dice: "mama mama donde esta la muñeca?"

    y tu como madre le respondes: "EN SU SITIO"

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